ENTRENAMIENTO FEMENINO

No me quiero poner como Schwarzenegger

19/04/2018 / Sin comentarios

Si me diesen un céntimo por cada vez que oigo este razonamiento en boca de una chica que quiere iniciar un programa de entrenamiento: "A ver, yo quiero ponerme en forma, estar durita, que esto de los brazos no se me caiga, que esta chicha de la cintura desaparezca; subir el culo, afinar las piernas, aplanar la tripa pero…. tampoco me quiero poner como Schwarzenegger”, sería tan rica, tan rica, tan rica, tan rica….

Y ya si el pobre Schwarzenegger lo oyese, le daba un ataque y a nosotras una colleja.

¡¿Chicas, qué nos pasa?! ¿Somos conscientes de todo lo que hace falta, tanto a nivel hormonal como nutricional, para tener la masa muscular de Conan?

Posiblemente todo el sector masculino se esté echando las manos a la cabeza, porque ellos para poder lucir apretada la manga del polo y marcar bíceps, les lleva  una buena levantada de peso con la que no pueden muchas repeticiones siquiera. Además, hay que tener en cuenta el factor hormonal y genético: la testosterona es la responsable en gran parte del aumento de masa muscular, y de eso chicas… tenemos más bien poco. 

LAS GRASAS: aquí hay más miedo que vergüenza...

Las mujeres y los hombres tenemos una anatomía diferente (este punto está claro…) y acumulamos la grasa en diferentes zonas. Mientras los hombres cuando suben de peso lo hacen en la región abdominal, la archiconocida zona del “flotador”, a las mujeres se nos va principalmente a las caderas (“cartucheras”) muslos y glúteos. Y esto no tiene más explicación que la genética y el reparto hormonal, como comentábamos anteriormente. 

Atención chicas: si lo que queremos es apretar nuestras carnes y perder esa capa de grasa que nos impide lucir una silueta estilizada, toma nota de los tres puntos IMPRESCINDIBLES para conseguirlo.


1-.ENTRENAMIENTO CARDIOVASCULAR: 

Todas aquellas actividades aeróbicas que impliquen el movimiento de los grandes grupos musculares: piernas y glúteos son las partes que más calorías consumen si se trabajan adecuadamente.

Natación, correr, bici, elíptica… son las actividades cardiovasculares por excelencia. Pero (siempre hay un pero) no por estar una hora todos los días dándole a la bici, vamos a hacer milagros con la grasa localizada. El cuerpo y su capacidad de adaptación a los distintos estímulos hace necesario que hagamos una planificación de nuestros entrenamientos si queremos sacar el máximo rendimiento.


2-.ENTRENAMIENTO DE TONIFICACION:

Nada mejor que combinar el trabajo cardiovascular que pondrá a funcionar nuestro metabolismo para perder grasa, con el de tonificación muscular que hará poner nuestros músculos fuertes, duros y resistentes como rocas.

Y aquí es cuando te pido que deseches esa idea de que por coger una pesa te vas a pone como Schwarzenegger, porque hay un abismo entre el entrenamiento para ponerse como un toro y el que hay que seguir para estar sana y bien.

La diferencia entre un entrenamiento para aumentar la masa muscular (hipertrofia- la de los “cachas”) y el de tonificación, radica sobre todo en el peso  y el número de repeticiones.

Es decir, lo que nos interesa a nosotras es el trabajo muscular con pesas de cargas en las que se puedan realizar 3 o 4 series de 15-20 repeticiones en cada una de ellas, sintiendo siempre en la última repetición de cada serie como “quema el músculo” ¡no te equivoques!: que quema pero puedes con ese peso, que nunca el peso te haga perder la postura correcta del ejercicio. 

*El número de series y de repeticiones estará condicionado en función de la forma física en la que estés y del grupo muscular que estemos trabajando; por ejemplo: para el tren inferior aumentaremos las repeticiones, ya que para nosotras es una zona delicada y donde tendemos a acumular la grasa cuando ganamos peso. 


3-. CONTROLA LA DIETA:

Solo ejercicio y nada de dieta o mucha dieta pero nada de ejercicio, no sirve de nada. Para estar bien son necesarias ambas cosas, la una no puede ir sin la otra: 50% dieta+50% ejercicio= 100% cuerpo bello y sano.

No debemos olvidar que cada persona es un mundo y que la alimentación está condicionada absolutamente a nuestros genes. Pero a no ser que exista una patología específica, por lo general todas responderemos bien al siguiente patrón alimentario: COMER COMIDA REAL.


Bueno pues ahí lo tienes, toda la información necesaria para asegurarte que te cuidas de manera saludable y para siempre.

Si tenéis cualquier consulta no dudéis en hacerla. Entre todas tenemos que conseguir perderle el miedo al deporte, a poner nuestro cuerpo a funcionar como nos lo pide, a mover esos músculos para poder lucir esta bella anatomía que la naturaleza nos ha dado.

¡Vivid vuestro femenino cuerpo y sed felices!